En el año 2024 se ha registrado un aumento significativo en los casos de enfermedades mentales en la mayoría de los países, en comparación con el año 2023. Entre las afecciones más comunes o frecuentes se encuentran la depresión y la ansiedad
Un estudio realizado por AXA en 16 países desarrollados durante 2024 revela que el porcentaje de personas con afecciones de salud mental varía entre el 26% y el 40% dependiendo del país
Asimismo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) la depresión, la ansiedad y los trastornos del dolor son las tres enfermedades más comunes en América Latina y el Caribe. Pero también hay otras afectaciones mentales que son importantes, como el consumo de sustancias, los trastornos bipolares, y alimenticios.,
Estás cifras nos invita a reflexionar sobre el impacto de la salud mental en el área laboral, sumándose las enfermedades propias del entorno de trabajo. Sabemos que la falta de salud mental puede provocar consecuencias como:
- Disminución del rendimiento.
Las personas que están atravesando una afección mental como por ejemplo depresión pueden experimentar falta de motivación, dificultad para concentrarse y problemas para completar sus tareas, etc. Además, las preocupaciones emocionales suelen interferir con su desempeño laboral afectando tanto su productividad como la calidad del trabajo
- Ausentismo laboral.
Las afecciones mentales si no son atendidas van incrementando su nivel de complejidad llevando a tener que tomar licencias psiquiátricas para tratar estos problemas lo que afecta la dinámica laboral. Por otro lado estas enfermedades emocionales pueden manifestarse en problemas de salud física que incrementa el ausentismo laboral
- Mayor rotación de personal.
Los empleados que se sienten abrumados por problemas de salud mental sin tratamiento adecuado pueden optar por cambiar de empleo en busca de mejores condiciones o menor presión. Esto implica costos adicionales para las organizaciones, como la contratación de nuevos empleados y el impacto negativo en la moral y la productividad de los equipos.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la depresión y la ansiedad cuestan a las empresas más de 1 billón de dólares anuales.
“Es momento de priorizar la salud mental en el lugar de trabajo”.
Para abordar este desafío, es fundamental implementar medidas de prevención y apoyo como:
- Diseñar programas de bienestar con el objetivo de prevención.
- Capacitar a los equipos de RRHH a saber detectar los primeros signos de alarma y actuar a tiempo
- Contar con equipo de asistencia psicológica y emocional.
- Promover una cultura de comunicación abierta y empática.
- Implementar políticas de equilibrio entre vida laboral y personal
- Reconocer y valorar el esfuerzo y los logros de los empleados
- Capacitar en gestión del estrés y resiliencia
Priorizando la salud mental, las empresas no solo mejoran la calidad de vida de sus colaboradores, sino que también incrementan la productividad, reducen costos asociados y fortalecen el compromiso del equipo
Como profesionales de la salud, desde Momento Cero acompañamos a las empresas con servicios especializados que ofrecen asistencia y asesoramiento frentes a situaciones críticas y dolorosas que afectan salud mental de los equipos